Casi las nueve de la mañana, se torna oscuro, casi de noche, en primer lugar se cubre por levante el Cerro Juana Díaz, luego por el sur el Cerro Los Granizos y, haciendo honor al nombre de este último una auténtica lluvia de pedruscos cae encima de Ojén, dejando el suelo como sembrado de pelotas de golf, blancas, duras, dañinas. Al rato desfile de coches con las lunas delanteras rotas, techos abollados, cristales traseros destrozados; un ir y venir de gruas, trajín de vehículos que van buscando talleres. Parece ser que últimamente la naturaleza se muestra caprichosa, embarazada de extraños antojos, o tal vez ¿nos responderá tal y como nosotros la tratamos a ella? ¿Será esta su manera de expresar sus ayes?
viernes, 21 de septiembre de 2007
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1 comentario:
Lo que me parece increible es que en los medios de comunicación no se hayan hecho eco como merece el suceso ocurrido en el pueblo, momento que coincidía con la entrada de alumnos de 3 años, entre otros, al colegio, con el terrible pánico que sufrieron las familias que se encontraban en plena calle en esos momentos. Definitivamente la naturaleza nos está "castigando" y deberíamos tomar buena nota y cada uno de nosotros poner nuestro granito de arena para intentar....sosegarla.
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